El sistema de videovigilancia es una gran herramienta para prevenir y disuadir robos o intentos de intrusión en distintos ámbitos, como hogares, oficinas e instituciones.
No sólo eso, sino que también es eficaz para descubrir los autores en caso de robos, tanto realizados por ladrones como por los propios empleados.
A pesar de los enormes beneficios, la videovigilancia presenta algunas desventajas que se relacionan exclusivamente por el tipo de cámara elegida.
Seguí leyendo y conoce los puntos débiles de las cámaras análogicas e IP.
Desventajas de la videovigilancia
Desventajas de las cámaras de seguridad analógicas
Una de las desventajas de las videovigilancia con cámaras analógicas, es que requieren que los dispositivos de grabación se conecten al monitor desde donde se ven las imágenes de la cámara, algo que no siempre es sencillo por el despliegue del cableado.
Además, la instalación suele ser algo costosa debido a los esfuerzos que el instalador tiene que realizar para esconder los cables por cuestiones de seguridad y estéticas.
Como consecuencia de ambos, resultaría más difícil la re instalación de alguna de las cámaras de seguridad, afectando la estructura de todo el sistema.
Desventajas de las cámaras IP
Cuando utilizamos cámaras Ip para el sistema de videovigilancia, corremos más riesgos de sufrir cortes de señal y sabotajes, ya que se pueden utilizar inhibidores para suspender la transmisíón.
Otra de las desventajas de la videovigilancia con cámaras IP, es que las probabilidades de sufrir un hackeo son mayores, exponiendo información personal y de un negocio.
A su vez, como la señal es más vulnerable, se pueden presentar interferencias y problemas de conectividad, afectando la nitidez de la transmisión.
Si bien las cámaras digitales funcionan con baterías recargables, no suelen tener gran autonomía, por lo que si no hay corriente eléctrica deberán, eventualmente, conectarse a un cable de alimentación.